miércoles, 26 de junio de 2013

                      Este semestre de la materia de "Enseñanza de la escuela secundaria. Cuestiones básicas I" ha sido, a mi criterio, muy productivo. Las clases me han gustado mucho y los contenidos se me han presentado de una manera relajada y sencilla, pero profunda.
                En este espacio, haré un pequeño análisis de los propósitos esperados por cumplir de cada bloque y lo que realmente aprendí en este periodo.


































          
Fig. 2
       

   En un panorama general, creo que cumplimos con los propósitos y las metas esperadas en el programa y que este semestre fue satisfactorio; aunque no hicimos las actividades tal cual lo marca la guía, creo que siempre es bueno variar y poder implementar estrategias diversas y no encasillarse en lo que diga un libro.
                En lo personal, fue una de las materias que más me gustaron de este periodo y lo que aprendí, lo hice de manera significativa y genuina, no sólo para aprobarla; asimismo pude desafiarme y probarme, analizar cosas a la par de los contenidos académicos, tuve la oportunidad de realizar reflexión de manera introspectiva que me ayudará en un futuro a definirme como docente. 

martes, 25 de junio de 2013




                               El avatar fue una actividad que se realizó con el propósito de desarrollar una dinámica  que nos ayudaría, además de repasar los temas del bloque 3 de la materia de "La enseñanza en la escuela se- cundaria. Cuestiones básicas I"; a auto evaluarnos y hacer una valo- ración general de los aprendizajes obtenidos por el grupo.

                El avatar es un autorretrato realizado en la mitad de una hoja tamaño carta que nos serviría para la conformación de un mazo de cartas para poder considerar al salón como el campo de batalla del juego "BattleGeek" (así le llamo yo); el cuál consistía en la división de todos los integrantes del grupo en dos equipos, nombrando un representante de cada uno; éste representante es el encargado de elegir a los contendientes de su respectivo equipo considerando los puntos de Ataque (ATK) y de Defensa (DEF) que el docente colocó anteriormente a cada individuo (basándose en su desempeño en el curso). Cada equipo tiene xxxx               puntos de vida. El personaje elegido por uno de los equipos hace una pregunta referente a los temas que se vieron en el periodo a evaluar (en nuestro caso, los temas del Bloque 3) y el del equipo contrario debe contestar correctamente, de lo contrario restan sus puntos de ATK. El objetivo del juego es derrotar al equipo contrario dejando en 0 sus puntos de vida.            Otra actividad alterna fue la de la elaboración de cartas de Trampa o Mágicas que servirían de apoyo para los equipos, permitiéndoles crear estrategias con su utilización.


                En lo personal, me pareció una dinámica muy interesante que le sirve al docente para hacer ya sea una evaluación continua o sumativa de un grupo determinado, y a la par de la evaluación, los alumnos repasan los contenidos previamente vistos y se divierten al mismo tiempo, creando un ambiente de una sana competencia.
Avatar

Anexo



            Entré al salón como de costumbre, cargando en ambas manos libros, bolsas lapiceros y demás herramientas que me servirían para ese día. -¡Buenos días!- me anuncio al entrar y aunque hay un poco de bullicio, mis oídos ya no conocen más el silencio. Acomodo mis cosas en el escritorio, que se sostiene a duras penas y saco mi lista. Espero a que el ruido disminuya un poco y comienzo a pasar lista. Al terminar, indico al grupo que saquen sus libros y sus libretas para revisar la tarea que dejamos para hoy. -¿Alguien quiere leer el problema?- pregunto esperando tener un poco de suerte y que alguien la haya hecho. Al fondo del salón se ve una mano tímida, pero decidida. Comienza a leer el problema y yo mientas paso por los lugares para asegurar la disciplina. Termina de leer y comentamos en el grupo, que fue lo que entendieron que tenían que hacer, algunas manos responden y yo hago comentarios al respecto, recordamos el tema que ya vimos para poder realizar y resolver el problema, -Alguien quiere pasar a resolverlo al pizarrón?- nadie responde, era de esperarse, así que elijo a alguien al azar, se levanta y con algunas palabras de aliento lo hago pasar. Le doy el marcador y comienza a escribir, les digo a los demás, mientras escribe, el propósito de que pasen al frente y que posteriormente si alguien tiene una manera diferente de resolver el problema, lo comentaremos. Cuando el alumno termina, el grupo le hace preguntas, el explica su método y le anoto una participación. Posteriormente, varios alumnos con distintas maneras de resolverlo, pasan al frente y siguen el mismo protocolo: resuelven, explican y contestan dudas de sus compañeros. Le pido al grupo que copien las nuevas maneras de responder y que hagan un pequeño análisis al respecto. Una vez que han terminado, comienza el bullicio de nuevo, pido orden y les hago ver que mientras más rápido terminen, podrán salir (porque mi clase era antes de receso). Veo a una niña haciendo nada al fondo del salón, mientras todos escriben, me acerco a ella y le pregunto qué le pasa, la respuesta obvia no se hizo esperar -Nada-me dijo, le dije que trabajara y que al término de la clase si quería, podía hablar conmigo. Una vez terminada la actividad, leímos algunas reflexiones y esto nos dio pie al siguiente tema, el cual apenas dimos una pequeña introducción porque el tiempo se estaba acabando, al final revisé la actividad que realizamos en el salón y sonó el tan esperado timbre. La alumna al final del pasillo me contó su problema y le di algunos consejos, pero le sugerí que hablara con su mamá al respecto, y que si no quería le conseguiría una cita con el psicólogo de la escuela. Se marchó más tranquila y al menos pude ver un atisbo de sonrisa en su rostro. Recogí mis cosas, con un poco de trabajo, y me dirigí a la puerta para entrar a un nuevo grupo.

Modelo Didáctico


"Los modelos didácticos son unos planes estructurados que pueden usarse para configurar un currículo, para diseñar materiales de enseñanza y para orientar la enseñanza en las aulas" (Joyce y Weil, 1985). Los modelos didácticos, son los que van a regir el actuar del maestro para poder alcanzar y lograr los propósitos y objetivos del sistema educativo y de los planes y programas, así que es de vital importancia que yo como futura docente, defina el modelo didáctico en el que me voy a basar para dirigir mis clases, mis estrategias, mis actitudes y mis acciones, así como encontrar un estilo de enseñanza y poder definirme como maestra.
            Durante este período escolar, pudimos analizar en clase 5 principales modelos didácticos, con características y principios muy distintos entre sí, pero que tienen consideraciones que se pueden adaptar al mundo actual y que pueden satisfacer las necesidades tanto del docente, como del alumno: a) El modelo Conductista, b) el Modelo Humanista, c) el Modelo por Descubrimiento, d) El Modelo Transmisión-Recepción y e) el Modelo de Prácticas. ¿Qué tipo de maestra soy?,  ¿Qué modelo didáctico utilizaré?, ¿Cómo los aplicaré?, ¿Cuánto tiempo me tomará ponerlos en práctica?,  son las pregunta más frecuentes que me hago  en estos últimos meses, ahora tengo la oportunidad de reflexionar y analizar cada uno y de, más o menos, poder construir mi modelo; que no se aleje de mis principios e ideales, y que pueda manejar de manera fluida, que satisfaga mis necesidades docentes y que aproveche mis habilidades, que me ayude a desarrollar aquellos aspectos en los que tenga limitaciones y que favorezca de manera efectiva y activa el aprendizaje de mis alumnos.
            El primer modelo que debo considerar es el Conductista (Behaviorista), que se basa en la apreciación del aprendizaje como la modificación de la conducta y  la creación hábitos; Iván Petrovich Pavlov, John Broadus Watson,  Burrhus Frederic Skinner, sus principales precursores, introdujeron la idea de que se debía motivar al alumno a que cambiara su comportamiento mediante ejercicios de motivación, esperando una respuesta positiva; y en caso de no obtenerla, se proporcionarían castigos o se aplicarían represalias, es decir, premios y castigos.
            Este modelo centra su atención en la comportamiento del alumno y en el condicionamiento, lo cual considero inconveniente, puesto que el alumno de alguna manera comprenderá el funcionamiento del modelo y posteriormente, manejará éste a su conveniencia; además la modificación de la conducta no siempre significa excelencia o está reflejada directamente en el aprendizaje, de manera que el alumno podría desarrollar dependencia a los estímulos y/o premios, y por consiguiente la relación maestro-alumno sería sumamente pobre.
             El aspecto que pudiera rescatar de este modelo, sería el fomento a la creación de hábitos, pero hábitos que favorezcan su desarrollo intelectual, y ¿por qué no?, de su desarrollo personal, propiciando actitudes positivas que le sirvan a corto y largo plazo, hábitos que  marquen una costumbre y sean beneficiosas para él y que no sólo sean para mi clase y para sacar una calificación excelente, más allá de eso, para mejorar su desempeño en todos los aspectos.
            El siguiente modelo que hay que analizar, es el  Modelo Humanista (Variable Afectiva), que utiliza la psicología para entender y ayudar al alumno, para crear motivadores internos que lo ayuden y conceden total importancia a la posibilidad que tienen de autorealizarse a través de la espontaneidad, creatividad y del desarrollo personal. Se centra prácticamente en las emociones y sentimientos del alumno, puesto que para lograr un aprendizaje significativo, primero el alumno debe sentirse bien consigo mismo. Abraham Maslow (1908-1980), desarrolló una teoría, en la cual cada persona genera una serie de necesidades organizadas jerárquicamente, las cuales debe cubrir para poder luchar por desarrollar necesidades de orden superior, que consiste en la búsqueda de conocimiento.  Por su parte Carls Rogers (1902-1987), co-fundador de la teoría Humanista, creía que el ser humano era el constructor de sí mismo, así que él se enfocaba en el autoconocimiento y la autoobservación, para encontrar la relación entre lo que queremos llegar a ser y lo que somos.
            Este modelo me parece bastante interesante en el orden del que hacer del maestro, puesto que nuestra función, es prácticamente, transportar al alumno en el aquí y el ahora (espacio y tiempo), aprender a derrumbar la llamada Barrera Afectiva, para que una vez que se cubran estas necesidades, entonces, realizar nuestra tarea académica.    Para mí, es muy difícil la práctica de este método, puesto que para llevarlo a cabo, habría que involucrarse de lleno en el alumno, y no sólo un alumno, en cada uno de los integrantes de un grupo, debería de tomarme un tiempo para poder colocar a todos los alumnos en el lugar idóneo para recibir el aprendizaje y lograr el proceso enseñanza-aprendizaje. No digo que esté mal saber lo que le pasa al alumno, pues es un condicionante bastante importante en cómo aprenderá, pero existe una línea muy delgada en cómo debe intervenir el maestro, una limitante presente en hasta dónde debe llegar el docente; éste sería el mayor obstáculo.
            El siguiente modelo es el Modelo por Descubrimiento (El aprendizaje se encargará de sí mismo); el cual está basado (creo yo) en el fracaso de los modelos tradicionales, porque su fundamento en el empirismo ingenuo, es decir, que el alumno va a descubrir el conocimiento por sí mismo y que el aprendizaje no necesita intervención humana, el docente no da instrucciones ni introduce conceptos, se limita a coordinar las actividades de observación y experimentación, favorece la investigación por iniciativa propia y en éste modelo, el alumno interactúa con sus pares y genera estrategias cooperativas. En lo personal este modelo me gusta mucho, porque favorece el análisis por parte del alumno, lo orilla a sacar sus propias conclusiones, a generar conjeturas y a buscar estrategias propias que puedan resolver los problemas; lo único en que no estoy totalmente de acuerdo o conforme, es en que el maestro no hace nada más que coordinar las actividades, se convierte en una especie de "niñero". Creo que es muy importante la intervención de alguna guía que conduzca el aprendizaje, que acompañe a los alumnos en su descubrimiento, que no les imponga, pero que con lo que ellos aporten a la clase se pueda construir y estructurar la información, creo que éste es el modelo que más me gusta y que me gustaría adoptar, pero no en su totalidad.
             El Modelo de Prácticas (Notando el Conocimiento) es el siguiente, este nos dice que el alumno debe aprender mediante la observación del mundo que lo rodea y la práctica, por lo que tienen responsabilidades, oportunidades de aprender y de conocer mientras ejercita complejas capacidades o recibe adiestramiento o capacitación. En la práctica el alumno es tanto un observador activo(participante) como también un asistente y un practicante responsable parcialmente, se espera generar experiencia y conciencia en el alumno. Este modelo caracteriza al estudiante como un ser autónomo y responsable, que adopta las decisiones y tareas que mejor responden a su condición vital, y aprovecha los escenarios formativos en los que participa, especialmente las experiencias personales y escolares.
            Una desventaja de este modelo, es que la práctica no asegura el aprendizaje, puede entrar en juego la memorización y esto no asegura que el aprendiz esté preparado para la vida y enfrentar sus problemas reales. Los alumnos se vuelven mecánicos en vez de cognoscitivos, se concentran más en manejar la información que en procesarla. Creo que la práctica es importante en la enseñanza, pero no me gustaría basar mi modelo sólo en eso, mis clases se volverían monótonas, mecánicas y exclusivamente desarrollarían la memoria en vez del análisis, la comprensión, la reflexión y la resolución de problemas.
            En 1968 Ausubel hace una fuerte crítica al modelo de descubrimiento autónomo y a los programas de enseñanza elaborados bajo esta concepción. Ausubel defiende un nuevo método de enseñanza expositiva o de transmisión-recepción, donde se recupera la importancia de la labor del profesor como garantía de la rigurosidad científica. El Modelo Transmisión-Recepción (Descubriendo el aprendizaje) se basa en el entendimiento conceptual y el desarrollo de habilidades cognitivas, comprende la abstracción para el aprendizaje y fomenta la exploración para llegar al entendimiento, también busca la excelencia y la buena conducta y trabaja en conjunto los niveles Cognoscitivo, Afectivo y Psicomotor. La interacción docente tiene como propósito la transmisión de informaciones del profesor a los alumnos, quienes actúan como receptores, y gracias a la imitación y la reiteración, lograrán reproducir los conocimientos que les fueron transmitidos. El papel principal dentro del proceso lo asume el profesor, puesto que el propósito fundamental es mostrar un conjunto de conocimientos.  El estudiante es considerado una página en blanco, los conocimientos se trasmiten elaborados por el docente en una clase y consisten en una serie de contenidos conceptuales. El alumno tiene una actitud pasiva o toma nota; la práctica es una ilustración de la teoría donde el alumno puede analizar los hechos, y comentar sus observaciones.
            Este modelo es el que más se acerca al que quiero aplicar, pues se centra en desarrollar habilidades específicas como la metacognisión (aprender a aprender), la solución de problemas y la creatividad; que van a ser de gran utilidad al alumno para poder procesar la información y manejarla, analizarla y por fin aprenderla. Lo que me gusta de este modelo es que se basa en el principio del Funcionalismo, pues cada quién, dentro del sistema, tiene una función que no se puede sustituir; cada cosa tiene un propósito y todo lo que se enseña sirve para algo.   También me gusta el aspecto de la exploración que activa el entendimiento, es decir, no sólo nos apoyamos de la información teórica, si no que se puede hacer uso de la experimentación y la práctica activa.
             Las estrategias docentes que propone se pueden emplear en todas las áreas  y aunque en general no se está satisfecho con sus resultados se suele atribuir este hecho no ha deficiencias en el propio modelo sino a causas externas a él, sin mencionar que es el método que más se utiliza actualmente y en que está basado el Plan 99, aunque realmente no todos lo aplican porque no lo entienden realmente, es decir, su base filosófica no ha sido totalmente apropiada por los maestros ni puesto en práctica correctamente.
            Todos estos modelos influirán, en gran parte en la realización del propio y constituirán los cimientos de mis próximas actividades como docente de Matemáticas.
           


         En conclusión, mi método será un coctel de todos éstos ya mencionados, será basado prácticamente en los modelos Transmisión-Recepción y el modelo del Descubrimiento, porque me gusta la idea de compartir la información para posteriormente estructurarla y reestructurarla con conceptos y teorías, pero también me gustaría apoyarme en la experimentación, la exploración y la posibilidad de facilitarle a los alumnos la reflexión y el que ellos puedan construir su propio conocimiento. Me gustaría poder participar en su crecimiento personal y emocional (Humanista), pero que exista una relación maestro-alumno adecuada y perfectamente delimitada por las responsabilidades y derechos de cada parte, que pueda ayudarlos a fomentar hábitos positivos (Conductista), pero sin condicionar su actuar, que su conducta solo sea reflejo de sus actitudes y que no sea motivo de premios o castigos; sin monotonía, didáctica y movida, que ellos participen activamente en las clases con sus opiniones, que no sólo yo explique, que ellos investiguen por cuenta propia y que aporten nueva información; que podamos convivir en un ambiente de respeto y confianza, y que ésta (la confianza) nos sirva para apoyar y escuchar en los momentos que el alumno lo necesite.
            Es mi método ideal, un poco alejado de la realidad que aqueja al mundo educativo de hoy en día, y sé que quizás este método tarde años en concretarlo, o que se me haga imposible aplicarlo tal cual lo describí; tal vez ni siquiera lo logre o tenga que experimentar cosas mediante ensayo y error; tal vez las condiciones y el entorno en el que me toque desarrollarme no me  permita ni siquiera considerarlo, probablemente tenga que cambiar algunas cosas sobre la marcha, pero es mi método soñado, y quisiera poder aunque sea imaginar la remota posibilidad de hacerlo mío y  que me permita llegar a mis alumnos como muchos buenos maestros llegaron a mí.